¿A quién no le gustaría que los hijos cuando nacieran vinieran con un libro de instrucciones bajo el brazo? Y es que, la crianza y la educación no siempre son fáciles. Cuando nace nuestro bebé muchas son las voces que oímos. Todo el mundo de nuestro alrededor siempre sabe más que nosotros y no dudan en dejárnoslo claro.
Categoría Autoestima
El albinismo es una condición genética que hasta el día de hoy es causante de controversias y aversiones por razones desconocidas que pocos se atreven a indagar. La historia de superación este valiente niño albino no solo te conmoverá el alma, sino que ayudará un poco a esclarecer el panorama y puede servir de ejemplo para que nuestros hijos aprendan que nadie ni nada puede limitar su personalidad ni sus sueños por muy diferente que sea su condición genética.
Son muchos los mensajes inconscientes que transmitimos a los niños cada día sin ni siquiera darnos cuenta. Y es muy probable que todos estos pensamientos nos fueran transmitidos anteriormente por nuestros padres, también involuntariamente. El problema es que todos estos conceptos pueden ser muy dañinos tanto para los padres como por los pequeños.
A todos nos tocó de pequeños o adolescentes enfrentar alguna burla. Sabemos que son situaciones difíciles de manejar que pueden generar un impacto negativo en la forma que una persona se ve a sí misma. Hay quienes tienen mejores recursos para enfrentarse a ellas y quienes, por el contrario, reaccionan tan mal que solo logran que la situación se complique más.
¿A quién no le gustaría que los hijos cuando nacieran vinieran con un libro de instrucciones bajo el brazo? Y es que, la crianza y la educación no siempre son fáciles. Cuando nace nuestro bebé muchas son las voces que oímos. Todo el mundo de nuestro alrededor siempre sabe más que nosotros y no dudan en dejárnoslo claro.
Desde hace unas semanas realizo en el centro en el que trabajo, sesiones para trabajar las habilidades sociales: fundamentalmente el respeto, la comunicación no violenta, la autoestima, la asertividad... Para ello, hemos seleccionado a algunos niños y niñas para que participen. Ellos y ellas, con edades comprendidas entre los 8 y los 9 años, desconocen los objetivos que hay detrás de esos juegos que hacemos, pero se sienten especiales porque no todos sus compañeros han sido elegidos para jugar.